Jueves 21 de agosto (ya caí en cuenta que no es jueves pero así lo voy a dejar)

Hace siglos que no escribía nada acá y antes de eso también, y... bueno. En gran medida se ha debido a que básicamente toda mi vida ha cambiado demasiado en los últimos meses. La vida oaxaqueña y la repentina libertad y tiempo para hacer cosas que no fueran trabajo, básicamente para "vivir", me tomaron un poco desprevenido.

No estoy seguro de que vaya a retomar propiamente la escritura en este blog, ni la frecuencia, pero no es como que importe demasiado de cualquier forma, más allá de lo que me sirva a mi externar mis venturas y desventuras.

Es quizá lo único que extraño de este blog, pues en realidad estos ejercicios siempre han sido más monólogos que otra cosa, yo y mi supuesta supra-auto-hiper-consciencia con quien platico para entenderme.

Como sea pues, voy a tratar de alimentar esto con otro tipo de cosas que quizás tengan un interés para alguien más que no sea yo, pero como siempre, no puedo prometer nada. 

En fin, la vida va (y a pesar de que de forma consciente o inconsciente encuentro las maneras de complicarme) va mejor, mucho mejor.


Fin del comunicado